martes, 18 de diciembre de 2012

RESCATATE PARA TODOS

Ya se sabe pero no está de más repetirlo (una y mil veces si hace falta): Rescatate es el campeón de la A. Llegó a la cima de una escalera imaginaria subiendo escalón por escalón. Sin saltearse ninguno. Viviendo y sufriendo cada categoría. Desencantándose como lo hizo en la D. Festejando como lo hizo en la C. Poniéndose el overol como lo hizo en la B. Decepcionando como lo hizo en su primera temporada en la A. Pero comprometiéndose en esta última etapa como nunca lo hizo. Y el resultado es claro y nos exime de cualquier análisis: somos campeones y no importa nada más.
Por eso no hace falta explicar lo que pasó en la final. Tampoco como llegamos a ella, ganándole a uno de los mejores equipos amateur que me tocó ver en mi vida. No importa todo este tiempo sin escribir y menos me interesa contar por lo que se pasó. Me quedo con este campeonato logrado por el equipo. Y por todos los que alguna vez formaron parte de Rescatate.
Y empiezo por los protagonistas de este título. El primero sin dudas es Chori, que se puso el equipo al hombro y empujó a todos a un campeonato impecable. Nos potenció las virtudes y escondió debajo de la alfombra nuestros defectos. Y los mantuvo ahí los 13 partidos. Todos los que conformamos el plantel. Sherman, ahora en Junín y celebrando a la distancia. Ando que se paró debajo de los tres palos y achicó el arco con sus voladas salvadoras en la final. El Cuervo y Gambetita, dupla impensada de centrales por la que Chori apostó un pleno y salió con los bolsillos llenos. Un mediocampo con presión, vértigo y explosión repartido entre el Agustino, el mejor del torneo, y Fede más Dieguito y el Mono, que todavía siguen surcando los laterales. Arriba los goles de Sacha y Nacho, una dupla que si se miraran un poco más serían irremplazables. Teto y el Negro, aportando cada vez que se los necesitó. Uno haciéndose patrón del fondo y fumador en momentos cruciales en que se cocinaba nuestra segunda estrella. El otro, sorprendiendo con su prestancia y su chanfle al bidón que nunca voy a poder (tampoco quiero) borrar de mi mente. Lio, volviendo de Italia y haciéndose grande en el partido en que todos lo necesitábamos. Somos nosotros, los que alguna vez me animé a bautizar como los mismos de siempre. Pero no los únicos. Están los que pasaron, tanto en este torneo como en otros no tan buenos. Por eso lo veo a Junior, con los guantes puestos cuando no teníamos quien se los ponga. El Cabezón y Panchito, aportando en uno de los peores momentos de Rescatate. Tuqui, que alguna que otra vez postergó los tambores y se vino a poner la rojinegra. Y si no a alentar. Son tantos…
Miro hacia atrás y me parece verlo a Fredy debajo de un diluvio y protegido con un paraguas disfrutando nuestro primer campeonato. Siempre estuvo presente así que seguro que donde esté, estará disfrutando el doble. Como olvidarme de Pigu? Si Pigu hubiese estado el sábado ni sufríamos. Lo ganábamos con tres goles suyos en el primer tiempo. Pero se fue a Neuquén y todo RFC lo extraña. También es de él. Y hay más que defendieron la camiseta: el Chino, con la rodilla casi erosionada por completo pero yendo a morir en cada dividida. El Capataz, de temer adentro y afuera de la cancha. Estuvo esperando este momento y volvió con el cartel de campeón. Y el Ruso! Completando el tridente, también estuvo presente aquella tarde lluviosa de diciembre alentando y festejando. Creo que no voy a terminar nunca…
El Poyo y Larry. Dos estandartes de Rescatate. Dos ídolos. Me pone feliz que sea de ellos también. De Henry, cuando nos llevó aquella vez en la ya extinta camioneta a todo el plantel a jugar (y casi deja al hijo en el eki por fisura). Dieguito Nigro, creador e impulsor de la copa de la vida, siempre con el descanso justo en el momento apropiado para descomprimir los momentos de tensión. Las pibas… que tantas se habrán bancado con tal de que nos pongamos la rojinegra cada sábado. Deo, Valen, Homero y Malek. Tan hinchas como cualquier ser humano. De quien me olvido?
Nico y Santi, sufriendo como todos nuestra derrota más humillante. Dimas, aportando en un par de partidos hasta con goles. Los que supieron estar en nuestra etapa en 11. El Vikingo, que me parece que fue ayer cuando lo vi llegar al eki con los botines y un par de bananas en una bolsa. Henao Bondi y su presencia intimidante en el arco. Victor, como arquero y DT. Y cuando digo DT me acuerdo de Eduardo. Se la hicimos difícil pero se manejaba cada sábado 100 km para hacerse presente. Javier Augusto, que decía ser la anti cábala y resultó ser la cábala.
Son muchísimos, somos muchísimos. Y si me olvidé de alguien es justamente por eso. Ya son muchas palabras y en una situación así sobran. Lo importante es que Rescatate salió campeón. Y, por suerte, es de TODOS.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

aplausos para esta crónica y mas aplausos para reskatate fc

Anónimo dijo...

veniiiimoss re puesto re gedientos
bancando a Rescatate donde va
te juro que los malos momentos
los pibes no te vamo abandonar

RFC para todos (y todas)

Anónimo dijo...

lloran las putitas de teniente
somos rescatate vamo al frente
ganamos la final, no te la olvidas mas
como la vas a sacar?
la pija de Rescatá?

Anónimo dijo...

gracias por otra alegria